El delito de daños está tipificado en el Código Penal (artículos 263 y 267), y tiene lugar cuando se destruye o damnifica un bien mueble o inmueble.
Clasificación del delito de daños
Es posible clasificar el delito de daños en tres tipos diferentes:
- El tipo básico está contemplado para los daños en propiedades ajenas que no se encuentren en otros títulos del Código Penal (artículo 263.1). Las multas oscilan entre los 6 y 24 meses en función de la condición económica de la victima y el grado de daño causado.
- El tipo agravado de daños se regula en el artículo 263.2 del Código Penal y su pena puede oscilar entre 1 y 3 años de prisión y multa de hasta 24 meses. En el tipo agravado se tendrán en cuenta los siguientes daños: Impedimento del libre ejercicio de la autoridad, empleo de sustancias venenosas o corrosivas, la infección del ganado, poner en una situación económica grave al perjudicado, afectar a bienes públicos y ocasionar un daño muy grave que afecte directamente al interés general.
- El tipo atenuado del delito de daños está considerado como delito leve siempre que no excedan los 400€. Se impondrán multas de 1 a 3 meses.
Daños según el Código Penal
Según el Código Penal, se considera daño el deterioro, la destrucción, la inutilización o alteración de una cosa. En cualquier caso, el concepto de daño en un marco legal es difícil de determinar.
También es muy importante comprender lo que entendemos como propiedad. Debemos tener en cuenta de que se incluirán cosas materiales e inmateriales. En el caso de las cosas inmateriales, nos referiremos concretamente a los sistemas informáticos, que son lo que más daños han sufrido en los últimos años.
La victima del delito tendrá derecho a una indemnización por el daño causado, y podrá reclamar una indemnización por daños. Es importante conservar todo recibo de los gastos ocasionados, ya que será mas fácil justificarlos mediante estos recibos.
Como saber si el daño causado llega a ser un delito
Se entiende como daño cuando se ve afectado el valor de una cosa. En el artículo 263 no quedan amparados los casos donde el daño de una cosa no altere la estructura de la misma.
Eso sí, el daño de objetos que tengan un valor sentimental (aunque tenga poco valor económico) podrá ser constituido como delito de daño. Será necesario demostrar esta perspectiva personal de ese objeto.
Esto significa que, en ocasiones el Código Penal podrá ir mas allá de la propia protección de la propiedad.
Daños informáticos
En este caso concreto, se considerará como daño el borrar, alterar, suprimir o deteriorar datos informáticos, documentos ajenos o programas. Si el daño es grave, la pena podrá ser desde 6 meses hasta los tres años de prisión.
Además, si estos daños afectan a un sistema informático poniendo en riesgo la seguridad del estado, podrán considerarse de gran gravedad. También se tendrá en cuenta como agravante si estos daños son ocasionados por una organización criminal.
La facilitación de contraseñas, códigos de acceso a sistemas sin autorización, o programas también son considerados un delito que se castiga con seis a dos años de prisión, o con multas de tres a dieciocho meses.
Delito de daños imprudentes
Los daños que se producen de forma imprudente, significan que no ha habido una intención o malicia en la realización de los mismos, y la pena para estos casos es de una multa de 3 a 9 meses, aunque dependerá del daño ocasionado.
Se tendrá en cuenta si la imprudencia ha sido grave dependiendo del nivel de descuido o negligencia a la hora de respetar las normas básicas (estos daños deberán superar los 80.000€).
Si el daño es menor a 80.000€, no se tendrá como una infracción penal, por lo que se deberá acudir a la jurisdicción civil. Esta clase de delito solo se tiene en cuenta cuando la persona afectada realiza una denuncia.